lunes, 18 de junio de 2012

Otra mesilla tuneada

De como hacer que un trasto se convierta en un objeto agradable a la vista.

Ingredientes:
Un mueble desechado por viejo o feo, si se ha encontrado en la calle el aliciente y la satisfacción es mayor.
Unas lijas.
Un poco de pintura.
Otro poco de imaginación.
Unas horas de tiempo libre.
Un poquito de paciencia.
y por último, mucho amor.

Hace unos días mi hija y yo nos desplazamos a una ciudad vecina, teníamos que hacer algunas cosas y quedamos en encontrarnos con otra de mis hijas que nos traería de vuelta en su coche.

Fuimos en tren y en el camino hacia donde nos dirigíamos, al lado de un contenedor había un montón de tablas de algún mueble desguazado, y junto a las tablas ¡una mesilla!. hacía mucho tiempo que quería una de esas mesillas con patas. En casa de mis padres había varias, pero tonta de mí en aquellos tiempos no las apreciaba y las tiré.
Nada más verla exclamé:¡La quiero! y naturalmente cogí la mesilla debajo del brazo y seguí caminando.
menos mal que no pesaba nada y se podía llevar sin esfuerzo.

Esta es la mesita tal como estaba, para hacer la foto tuve que armarla de forma provisional
Ahora podéis imaginarla con un barniz tan brillante como el de un ataúd.
Cuando llegamos donde mi otra hija nos esperaba, ¡sorpresa!, otra mesilla del mismo estilo, aunque más grande y con crital.Como no podía ser de otra manera volví a decir: ¡la quiero!.
La cara de mis dos hijas era todo un poema, pero ya están acostumbradas, Laura más valiente cogió una de ellas, la de la foto y yo la otra, Cristina no sabia donde meterse de la vergüenza que le daba. Así cargadas dos con las mesillas y una con el bochorno fuimos a buscar el coche para dejarlas, no sabeis lo lejos que estaba el coche y lo que pesaba la dichosa mesilla con cristal incluido.
Al llegar e intentar ponerlas en el maletero empezaron los problemas, aquello no cabía y como no estaba dispuesta a dejar "mis tesoros, me armé de un destornillador y arranque las patas y molduras de ambas victimas
Comencé el trabajo con .la mesilla más pequeña.
Aquí está desarmada y comenzando a lijar.
Tenía pensado hacerla en blanco y dejar los cajones y el sobre en su color natural, por lo que me armé de paciencia y lijé,y lijé hasta que me dí cuenta que no tenía arreglo, es de contrachapado con un barniz horroroso y difícil de quitar
Mis nietas colaboraron conmigo para restaurarla.

Aitana en la fase de imprimación

Brianda "pintando"
Como no me gustaba como estaba quedando cambié de idea y le pinté el sobre de un gris muy claro y los cajones de otro más oscuro para después craquelar en blanco.En la parte superior le pinte una volutas con plata y gris oscuro.

Le puse unos tiradores recuperados de una cómoda antigua , estaban un poco oscuros pero después de un ratito en vinagre y una frotadita con un paño limpio quedaron preciosos y al mueble le sentaban como un guante
Aquí ya está terminada. Estoy muy contenta con el resultado, el problema ahora es, ¿donde la pongo?

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